Estilos de Liderazgo

  • Por Claudia Hurtado

Las Empresas buscan líderes que definan las estrategias del negocio, logren motivar a las personas y enfocarlos en cumplir la misión y alcanzar la visión organizacional.

Diversas teorías intentan explicar los estilos de liderazgo. Lo cierto es que en la realidad laboral algunos estilos son efectivos y otros limitan el trabajo en equipo y afectan negativamente la moral de los colaboradores y por lo tanto afectan la productividad, entre éstos se mencionan: el estilo autocrático, el burocrático, el perfeccionista, entre otros.

Estos estilos pueden generar desmotivación, confusión en el trabajo, individualismo, etc. También pueden incidir en la rotación laboral, por lo que es importante que RRHH presente estadísticas sobre los retiros por áreas organizacionales.

Por otro lado, se describe a los estilos positivos, como por ejemplo el Democrático, el Desarrollador que facilita las oportunidades para el crecimiento profesional, y el estilo enfocado en los resultados y relaciones buscando un equilibrio que le permita tener a un equipo motivado y de alto desempeño.

A continuación describiré los estilos más conocidos:

ESTILO PARTICIPATIVO

Busca consenso en la resolución de problemas del trabajo, se toma el tiempo requerido para escuchar las opiniones de sus colaboradores, busca ideas para mejorar los procesos.

Este estilo tiene aceptación y efectos positivos en el clima laboral, ya que toma en cuenta las iniciativas y propuestas para el alcance de los objetivos del área. Facilita que las personas usen su creatividad y se sientan valoradas, ya que perciben que sus aportes son importantes para la empresa.

Un Líder participativo se caracteriza por:

  • Se interesa por conocer los puntos de vista de su equipo de trabajo
  • Comprende las ideas propuestas y busca desarrollarlas
  • Toma decisiones en consenso
  • Tiene la habilidad para negociar y buscar acuerdos
  • Tiene capacidad para manejar conflictos

ESTILO DESARROLLADOR

Uno de sus objetivos es capacitar a su equipo de trabajo, se toma el tiempo para enseñar procesos técnicos, permite la asistencia a entrenamientos y motiva a su equipo a aprender y continuar estudiando.

Confía en su equipo de trabajo, se caracteriza por estar continuamente buscando oportunidades para capacitarlos, de tal forma, que si se ausenta el departamento o área funciona eficientemente.

Puede llegar a formar una academia técnica o una escuela dentro de su área, con el único objetivo de brindar entrenamientos.

Este es un estilo efectivo, ya que mantiene motivado a sus colaboradores y les facilita crecer, aprender y disfrutar el trabajo.

LO QUE NO DEBE HACERSE

Algunas personas en niveles directivos obstaculizan el desarrollo de su equipo de trabajo y se pueden presentar las siguientes situaciones:

  • Les impiden asistir a capacitaciones o entrenamientos, ya que consideran que esto es pérdida de tiempo.
  • Cuando el colaborador pregunta sobre temas de trabajo le esconden la información, ya que consideran que debe «pagar el derecho de piso» como suele decirse
  • Centralizan las tareas técnicas porque se sienten amenazados, evitan delegar
  • Si al colaborador se le presenta una oportunidad de ascenso o de traslado, lo convence de quedarse a través de un incremento salarial o mejora de beneficios
  • En algunos casos, si el colaborador busca una mejor oportunidad, brinda malas referencias para obstaculizar su progreso.

ESTILO AUTOCRATICO

Es un estilo poco efectivo, ya que tiene un impacto en la moral de los colaboradores. Es una persona poco flexible, que confía únicamente en su criterio y no permite opiniones de su equipo de trabajo. Le gusta llamar la atención en público, a veces grita, pierde el control y trata mal a sus colaboradores.

Algunas personas opinan que este estilo es efectivo para manejar crisis, ya que por la emergencia se deben tomar decisiones y no dar opción a la participación u opiniones para evitar retrasos y lograr solucionar problemas eficazmente.

ORIENTADO A LAS RELACIONES

Busca aceptación por parte de las demás personas, se preocupa porque todos estén felices, suele ser popular, divertido, crea buen ambiente de trabajo. Puede llegar a perder de vista los objetivos de trabajo y la mejora continua, se le hace muy difícil tomar decisiones impopulares.

ENFOCADO EN LAS TAREAS

Pretende lograr un compromiso hacia alcanzar los objetivos organizacionales, puede llegar a descuidar las relaciones, tiende a ser una persona poco empática. Define estándares en su área de trabajo.

ESTILO PERFECCIONISTA

Sus exigencias son altas y le gusta que tomen su ejemplo, se obsesiona con la calidad, eficiencia y alto desempeño, se enfoca en los detalles.

Si no se cumplen sus expectativas reemplaza a sus colaboradores. Puede llegar a tener comportamientos compulsivos y obsesivos con los trabajos que revisa.

Al ser muy exigente, trabaja fuera de la jornada laboral, incluyendo fines de semana, esperando que su equipo también trabaje a su ritmo.

REFLEXIONES

Gozar de un clima laboral armonioso es un reto diario, mantener relaciones positivas de trabajo es indispensable en la realidad cotidiana.

Cada Líder tiene su propia personalidad y su propio estilo, por lo que es importante conocer sus fortalezas y áreas de mejora, pedir retroalimentación a los colaboradores y colegas para enfocarse en su propio desarrollo.

Cuando un Líder no toma en cuenta el efecto de su estilo debe enfrentar problemas tales como: rotación de personal, ausentismo por permisos e incapacidades, fuga de talentos, bajos resultados en la encuesta de clima laboral, bajo desempeño, etc.

Si Ud. debe relacionarse con un Líder con un estilo negativo, antes de tirar la toalla, reflexione sobre los detalles que le molestan, piense la mejor forma de abordarlo, busque un momento adecuado y oportuno para conversar y sobre todo, auto contrólese y auto motívese constantemente.

Cada Líder debe reconocer su propio estilo y buscar uno efectivo para motivar a su equipo hacia el alcance de los objetivos disfrutando el camino, además, creando un buen ambiente de trabajo, en el que se sientan cómodos discutiendo sus puntos de vista y problemas, en el que cada persona no sienta miedo a expresarse.

Todo Líder siempre debe buscar momentos de auto reflexión, observando las actitudes y el lenguaje no verbal de sus colegas y colaboradores, buscando «ponerse en el lugar» de la otra persona, y resolver los problemas en lugar de complicarlos. Asimismo, aunque resulte difícil comprender que cada persona tiene su propio ritmo de trabajo.

Las organizaciones deben incluir programas para fortalecer el liderazgo positivo para promover una cultura basada en valores y formar equipos de alto desempeño.

Scroll al inicio